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Acaba de comprar un sofá/mueble Roche Bobois :
Ha quedado prendado por sus líneas, sus colores... ahora descubrirá sus secretos: cómo está hecho, cómo preservar sus cualidades.
Este manual ha sido pensado para guiarle.
El encanto, la belleza y el tacto de las pieles elaboradas especialmente para Roche Bobois son el resultado de las operaciones realizadas en curtiduría. Estas operaciones pueden resumirse en dos fases principales: la primera fase consiste en transformar la piel bruta en un producto sano, flexible, imputrescible y resistente en el tiempo. La segunda fase consiste en aportar, mediante operaciones de acabado, el aspecto estético final de la piel (nutriente de la piel, baño de colorante, aplicación de pigmentos, colorantes y fijadores de superficie...). La piel transformada en cuero adquiere así, en el transcurso de estas operaciones, todas las características que le han seducido en el momento de la compra de su sofá Roche Bobois.
El curtido y las operaciones de acabado aportan a la piel todas las cualidades de un producto noble. Sin embargo, las operaciones realizadas en curtiduría no borran las huellas de lo vivido por la piel. Las marcas que el animal ha sufrido en vida en los pastos son marcas de autenticidad y forman parte integrante de la piel. Estas marcas, a menudo ligeramente visibles, no perjudican en nada la calidad de la piel (pliegues de grasa, estrías, heridas cicatrizadas, picadas de insectos). Son el testimonio y la garantía de una piel natural cuya flor está intacta. Después de algunos meses de utilización, la piel, sometida a las variaciones de temperatura, a las tracciones y estiramientos, coge poco a poco su estado físico definitivo. El cuero se adapta a las tensiones de su entorno y conserva a menudo algunas distensiones residuales de piel. Este fenómeno normal, idéntico para las pieles utilizadas en la confección o la marroquinería, es más o menos visible en función de la intensidad de la utilización de los asientos, de las características de su entorno (temperatura, higrometría…), de la flexibilidad de los asientos y del espesor de la piel.
Para aprovechar plenamente y durante mucho tiempo sus asientos de piel, procure respetar algunas reglas básicas. La piel, según su tipo de acabado, es más o menos sensible al calor y a la luz, incluso por reverberación. Estos factores pueden resecar la piel y apagar la vivacidad de sus colores. El emplazamiento de los asientos en su entorno deberá evitar si es posible una exposición directa a los rayos del sol o una colocación próxima a ventanales. Procure no situar los asientos cerca de una fuente de calor intensa (chimenea, radiador o cualquier aparato de calefacción).
Observe y respete los consejos de mantenimiento para preservar las cualidades físicas y estéticas de la piel. No espere a que se ensucie para empezar las operaciones de mantenimiento, no intente hacer operaciones de limpieza, quitar manchas,… sin los productos adecuados. La piel es, sin embargo, un material resistente y al igual que un revestimiento de madera u otro material, es sensible a las agresiones físicas intensas que pueden dañar su hermoso aspecto (rayaduras de objetos puntiagudos, rasguños de animales domésticos, roces de tejidos o de ropa áspera, remaches o hebillas de ropa...). Procure evitar estos tipos de agresiones sobre la piel. Preste especial atención a ciertos acabos "vaqueros" cuya transferencia de color sobre el cuero, sobretodo en cueros claros, puede ser irremediable.
- ELIMINACIÓN DEL POLVO:
La cantidad de polvo y de suciedad que se deposita en la piel es equivalente a la que se deposita en un mueble de madera y que desempolva regularmente ya que éste es muy visible.
Para evitar que el polvo deslustre la piel y se incruste en las nervaduras de la misma, efectúe un desempolvado semanal, sobre todo si su sofá tiene un asiento acolchado, ya sea pasando la aspiradora con ayuda de un adaptador de cepillo suave, ya sea pasando un trapo suave humedecido en la superficie de la piel.
- MANTENIMIENTO :
El mantenimiento de la piel es esencial para preservar el aspecto estético y físico de la piel en su futuro inmediato. El mantenimiento se efectúa en dos operaciones, a realizar cada trimestre:
Limpieza:
Se realiza con ayuda del champú "SOFT CLEANER" contenido en el kit de mantenimiento de las pieles Roche Bobois especialmente diseñado a este efecto, o con ayuda de una solución de limpieza (diluya un poco de jabón de Marsella o su equivalente en un recipiente de agua templada. Evite utilizar un jabón o detergente agresivo).
Metodología:
Vierta un poco de champú “SOFT CLEANER” sobre la esponja del kit o sobre una esponja suave no rugosa. Haga espuma con el producto presionando la esponja y limpie mediante pequeños movimientos circulares dejando que el producto actúe para eliminar correctamente la suciedad en las nervaduras de la piel. Evite frotar la piel con demasiada intensidad. El efecto limpiador se obtiene con la reacción del producto y el tiempo que deje actuar al producto.
Evite mojar demasiado la piel. Aclare regularmente la esponja para eliminar la suciedad recogida. Al final de la limpieza, efectúe una pasada con la esponja aclarada y humedecida sin producto limpiador y deje secar.
Nota: para las pieles granuladas se aconseja utilizar un cepillo suave (pelo de seda) al aplicar el champú. La acción del cepillo con pequeños movimientos circulares activa la limpieza y evita la penetración de suciedad en los nervios.
Protección:
Esta operación se realiza con ayuda del producto "Crema de mantenimiento" contenido en el kit de mantenimiento de las pieles Roche Bobois y del trapo previsto a este efecto. Existe un kit para las pieles sensibles a las agresiones de los rayos ultravioletas. Este producto, además de la protección, limita esta agresión. Si no dispone de este producto, se tendrá que seleccionar en el mercado un producto de sustitución con cualidades protectoras y nutrientes equivalentes. Evite los aerosoles que contengan disolventes y los productos a base de aceite o de grasa.
Metodología:
Vierta un poco de producto en el trapo previsto a este efecto, extienda el producto sin frotar para cubrir la superficie de la piel de manera uniforme. Insista bien a nivel de los asientos, de los apoyabrazos y de los respaldos. Deje secar y dé eventualmente brillo con ayuda de un trapo de lana si desea obtener un efecto brillante.
Todas las pieles seleccionadas por Roche Bobois han recibido en curtiduría una protección de base en la masa de la piel o en superficie.
El mantenimiento regular permite preservar esta protección y facilita las operaciones de limpieza.
En caso de mancha accidental, intervenga lo antes posible sin precipitación. Antes de efectuar la operación de limpieza con ayuda de productos, elimine al máximo la materia causante de la mancha con ayuda de un tejido absorbente sin frotar.
Impregne la esponja del kit Roche Bobois, o una esponja doméstica suave, con el champú "SOFT CLEANER" contenido en el kit de mantenimiento para pieles Roche Bobois o con una solución limpiadora definida en el capítulo “Limpieza” de estas instrucciones.
Haga espuma con el producto en la esponja y frote la mancha o actúe mediante pequeños movimientos circulares sin raspar el acabado de la piel. Deje tiempo al producto para que actúe. Repita la operación si es necesario. Limpie el lugar manchado con la esponja aclarada con agua. Si ha efectuado con regularidad el mantenimiento preventivo con ayuda de la crema de protección, "SOFT CLEANER" eliminará la mayor parte de las manchas corrientes.
IMPORTANTE: después de la limpieza de las manchas, aplique la crema de protección para proteger la piel en el lugar de la limpieza.
Tipo de mancha – Metodología
Tinta líquida: dirigirse a su tienda Roche Bobois.
- Bolígrafo: utilice una mezcla 1/4 de agua y 3/4 de alcohol. Empape un palito de algodón en la mezcla y limpie frotando ligeramente sobre la mancha. Después de la limpieza, no olvide volver a proteger la piel. Si la mancha ha penetrado en la piel y se resiste, no insista; consulte con su tienda Roche Bobois.
Humo: método N° 1.
Pintura al agua: método N° 1.
Pintura con disolventes: contacte con su tienda Roche Bobois.
- Pintalabios: método N° 1.
- Azúcar, alimento: método N° 1
- Leche: método N° 1.
- Sangre: mezcla con 10% de vinagre blanco y 90% de agua.Aclare con la esponja y proteja la piel con la crema de protección.
- Aceite, grasa, sebo, sudor: método N° 2.
- Orina: método N° 1.
- Barro: método N° 1.
Al igual que todos los soportes textiles (moquetas, alfombras, cortinas...) y en función de la naturaleza del tipo de fibra que lo compone, el tapizado textil es más o menos sensible a la luz y al calor. La disposición del sofá en su entorno deberá evitar, en la medida de lo posible, una exposición directa a los rayos del sol o un emplazamiento muy próximo a una fuente de calor. El polvo, equivalente al que se deposita en sus muebles de madera, la suciedad relacionada con la utilización de los asientos (roce de la ropa, de las manos, pequeñas manchas accidentales...), son los primeros factores que deslucen los tejidos y perjudican su aspecto estético. No espere a que la suciedad que aparece en las partes más expuestas de sus asientos sea demasiado importante para empezar el mantenimiento recomendado.
• Método N°1
Impregne una esponja limpia con el champú contenido en el kit quitamanchas Roche Bobois o con una solución limpiadora (mezcla al 5% de jabón líquido neutro tipo Woolite® y complemento de agua fría). Efectúe pequeños toques con ayuda de la esponja y absorba con ayuda de un trapo esponjoso seco para eliminar el producto y la mancha. Repita la operación si es necesario evitando empapar el tejido hasta lograr un resultado satisfactorio. Evite frotar o rascar intensamente el lugar en el que actúa para evitar alterar el tejido. Al final de la operación de limpieza de manchas y después de haber secado bien el lugar tratado, espolvoree la parte humedecida con el polvo absorbente del quitamanchas para eliminar los residuos de productos y el riesgo de cualquier rastro. Deje secar, aspire con ayuda del adaptador de una aspiradora provista de un cepillo suave y potencia floja para no romper las fibras de la tela.
Limpieza de manchas con ayuda de una aspiradora (para las manchas importantes o de fuerte derrame).
Aplique el quitamanchas o la solución limpiadora recomendada, efectúe toques con ayuda de una esponja para activar el efecto limpiador. Aspire la mancha con el adaptador redondo del tubo de la aspiradora, a potencia media, rebasando ampliamente la parte humedecida. Repita la operación si es necesario, aplique el polvo absorbente, deje secar y aspírelo.
Nota: la aplicación del polvo absorbente es importante. Permite extraer los residuos de manchas y evita la formación de aureolas.
• Método N°2
Realice una mezcla de 1/3 de agua, 1/3 de alcohol de 90° y 1/3 de vinagre blanco.
Utilice el método N° 1 sustituyendo el champú por la mezcla creada.
Nota: si no tiene la posibilidad de realizar la mezcla de producto, una prueba de limpieza con ayuda de el método N° 1 puede resultar suficiente.
• Método N°3
Realice una mezcla de agua al 70 % con amoníaco al 30 %. Utilice el método N° 1 sustituyendo el champú por la mezcla creada.
Nota: si no tiene la posibilidad de realizar la mezcla de producto, una prueba de limpieza con ayuda de el método N° 1 puede resultar suficiente.
• Método N°4
Aplique disolvente con cloro o alcohol de 90º con ayuda de un trapo limpio y efectúe toques sin frotar. Aplique el polvo absorbente, deje secar y aspire. Repita la operación si es necesario. Termine la operación de limpieza con una aplicación completa de el método N° 1.
Seleccione la metodología en función del tipo de mancha a eliminar.
Aplique el primer método recomendado y detallado en las instrucciones y luego deje secar.
Pare la operación de limpieza de manchas si el resultado es satisfactorio.
En caso de residuos de manchas, utilice cronológicamente las metodologías siguientes recomendadas.
Consulte la tabla de tareas de la correspondencia en el guía de mantenimiento disponible en formato pdf.
• Otros tipos de manchas
Esta operación se efectúa cuando, a pesar del mantenimiento regular, es necesaria una limpieza más general para mejorar el aspecto estético de los asientos (se aconseja recurrir a los servicios de un profesional).
• Método de limpieza
Humedezca uniformemente las superficies a limpiar con el champú limpiador Roche Bobois contenido en el kit de limpieza o la solución limpiadora recomendada. Use un recipiente con agua tibia. Añada de 5 a 10% de champú textil Roche Bobois. Sumerja el guante de microfibra de limpieza en el líquido y escúrralo ligeramente. Pase el guante de limpieza sobre toda la superficie textil de sus asientos.
Nota: para evitar cualquier riesgo de halo residual, es importante que la aplicación del champú sea uniforme en toda la parte textil tratada.
Enjuague regularmente el guante para eliminar la suciedad. Al finalizar la limpieza, realice un pase del guante humedecido con agua tibia solamente enjuagándolo regularmente para eliminar los residuos de suciedad y champú. Deje secar, aspírelo con el cepillo suave de una aspiradora con potencia floja para no romper las fibras.
Las microfibras que recubren sus asientos Roche Bobois son de fácil mantenimiento. Sin embargo, para preservar sus propiedades y disfrutar plenamente en todo momento, es necesario un mantenimiento regular y adaptado. El seguimiento del método de mantenimiento recomendado le permitirá eliminar la suciedad superficial y las manchas accidentales relacionadas con la utilización de su sofá.
Al igual que todos los soportes textiles (moquetas, alfombras, cortinas...), las microfibras son sensibles a la luz y al calor.
La disposición del sofá en su entorno deberá evitar si es posible una exposición directa a los rayos del sol y la luna o un emplazamiento muy próximo a una fuente de calor.
El polvo, equivalente al que se deposita en sus muebles, la suciedad relacionada con la utilización de los asientos (roce de la ropa, de las manos, pequeñas manchas accidentales...), son los primeros factores que deslucen los textiles y perjudican su aspecto estético.
No espere a que la suciedad que aparece en las partes más expuestas de sus asientos sea demasiado importante para aplicar el mantenimiento recomendado.
Cuando, a pesar de un mantenimiento regular, sea necesaria una limpieza más general para mejorar el aspecto estético de los asientos, hay varias opciones posibles.
• Método N°1
Aplique en la mancha el spray quitamanchas Roche Bobois contenido en el kit de limpieza, o bien agua fría jabonosa (5% de jabón líquido tipo Woolite® y el resto de agua). Utilice una esponja para dar toques a la mancha. Absorba la mancha y el producto limpiador con ayuda de un trapo seco no rugoso.
Seque la mancha con el trapo mediante pequeños movimientos circulares rebasando la mancha y utilizando regularmente una nueva parte seca del trapo. Repita la operación de limpieza si es necesario.
Al final de la operación, espolvoree la parte humedecida con el polvo absorbente quitamanchas para eliminar los residuos de productos y el riesgo de cualquier rastro. Deje secar, aspire y cepille el tejido para volverle a dar su aspecto aterciopelado.
Limpieza de manchas con ayuda de una aspiradora (para las manchas importantes o de difícil lavado) :
Aplique el spray limpiador o la solución limpiadora recomendada, efectúe toques con una esponja para activar el efecto limpiador. Aspire con el adaptador de un tubo de aspiradora, a potencia media, la mancha que queda en suspensión por la acción del producto limpiador, rebasando ampliamente la parte humedecida.
Repita la operación si es necesario. Seque con ayuda de un trapo absorbente seco, aplique el polvo absorbente, deje secar, aspire y luego cepille.
• Método N°2
Realice una mezcla de 1/3 de agua, 1/3 de alcohol de 90° y 1/3 de vinagre blanco.
Con ayuda de una esponja, aplique la solución y opere utilizando el método N° 1 con la mezcla creada en lugar del spray quitamanchas.
• Método N°3
Realice una mezcla de 70% de agua y de 30% de amoníaco.
Con ayuda de una esponja, aplique la solución y opere utilizando el método Nº 1 con la mezcla creada en lugar del spay quitamanchas.
• Método N°4
Aplique el quitamanchas Roche Bobois para manchas residuales grasas o coloreadas, aguarrás o alcohol de 90° con ayuda de un trapo limpio. Efectúe ligeros toques con pequeños movimientos circulares rebasando los límites de la mancha.
Repita la operación si es necesario.
Termine la operación de limpieza mediante una aplicación completa del método N° 1.
Seleccione el método en función del tipo de mancha a eliminar. Aplique el primer método recomendado y detallado en las presentes instrucciones y después deje secar.
Pare la operación de limpieza si el resultado es satisfactorio.
En caso de residuo de mancha, utilice cronológicamente los métodos en la tabla de tareas.
Consulte la tabla de tareas de la correspondencia en el guía de mantenimiento disponible en formato pdf.
• Otros tipos de manchas
Los sofás Roche Bobois están diseñados con una estructura de madera maciza (haya, álamo o abeto), con varios travesaños de refuerzo para los asientos. Unos paneles de multipliegues y/o partículas permiten reforzar todas las estructuras. Unas láminas de espuma de diferentes espesores aseguran la flexibilidad entre la carcasa y el revestimiento.
Existen principalmente tres tipos de suspensión:
Se trata de la tela que se encuentra debajo del sofá. Para la mayor parte de nuestros sofás, esta tela está clavada al estilo tapicero en la estructura.
Esta tela está, en la mayor parte de nuestros sofás, tejida de forma muy apretada con un hilo grueso y flexible para lograr un buen aguante en el tiempo.
En algunos modelos, es acolchada y cosida con costuras en "S" o en "X". Para los sofás desenfundables, utilizamos una tela de algodón ya lavada a alta temperatura con el fin de que no encoja durante los lavados sucesivos de la funda.
Existen 2 grandes familias de patas cuya forma y tintado varia según el diseño del sofá:
La higrometría corresponde al grado de humedad en el aire. Su influencia en los muebles macizos es importante. Las maderas son utilizadas "secas" en el momento de fabricación de los muebles, su grado de humedad se sitúa entre el 8 y el 12%, pero la madera sigue siendo un material vivo y queda sujeto a variaciones dimensionales.
Una atmósfera demasiado seca debida a un calor excesivo puede provocar contracciones o incluso ligeras grietas en los paneles macizos. Por el contrario, una atmósfera anormalmente húmeda puede dilatar las maderas y causar la ruptura de los ensamblajes.
La calibración consiste en asegurar la horizontalidad de los muebles con irregularidades. Un mal calibrado puede causar una discontinuidad de las puertas. Una buen calibrado eliminará la mayoría de problemas de cierre de puertas.
Al igual que con muchos materiales, y a pesar de los barnices de protección, la exposición a la luz (rayos UV del sol, de la luna) puede cambiar los tintes de las maderas macizas y chapadas: la madera clara (cerezo...) tiende naturalmente a oscurecer, sobre todo el primer año. La madera oscura puede decolorarse. Los chapados reconstituidos (Alpi®) sin embargo, permanecen invariables a los efectos de los rayos UV.
Nunca pase un trapo seco, utilice un trapo de algodón ligeramente húmedo y séquelo. Nunca use productos que contengan disolventes (alcohol...).
Utilice un aceite natural para nutrir la madera y devolverle su brillo y su aspecto original, una a dos veces al año.
Material de 3 mm de grosor, de alta resistencia, brillante y tintado en la masa. Mantenimiento cotidiano: no pase nunca un trapo seco, utilice un trapo de algodón humedecido y séquelo.
Eliminación de arañazos: solicitar el kit de mantenimiento Roche Bobois.
- Para los arañazos superficiales: empapar un algodón de producto de renovación (tipo Miror® o auto-pulido) y frotar la superficie haciendo círculos sobre las rayas hasta que desaparezcan por completo; posteriormente limpiar con un producto para cristales. Teniendo en cuenta el grosor, esto puede repetirse varias veces, sin riesgo de alterar el material.
Para arañazos profundos, contacte con la tienda Roche Bobois ya que la operación requiere de personal especializado.
Limpiar con un trapo húmedo y secar. No utilice productos químicos.
Lustrar regularmente los elementos cromados o pulidos con productos de limpieza específicos de metal brillante.
Desempolvar periódicamente sus muebles con un paño suave y seco.
En el caso de micro-arañazos, pasar un pulido limpiador especial muebles con un paño sin pelusa de algodón, frotar y lustrar.
Desempolvar sus muebles periódicamente con un paño suave y seco.
Se recomienda utilizar una cera de abeja 100% natural de abeja o de Carnauba. Aplique la cera con mecha o lana de acero nº 0000, extender la capa de cera en la dirección de la veta de la madera. Dejar endurecer la cera, a continuación, frotar siempre en la dirección de las fibras para lustrar con lana de acero nº 0000 seca o con un paño seco. Su mueble volverá a tener el brillo natural de la pátina a la cera.
Nunca utilice productos disolventes o productos que contengan disolventes ni productos en aerosol.
Eliminar el polvo regularmente con el resto de las piezas de mobiliario en piedra o mármol con un paño suave y seco.
Nunca utilice detergentes ácidos, tipo descalcificación, ya que pueden dañar el mármol.
Para la suciedad persistente, se recomienda utilizar un detergente / jabón neutro, suave, sin alcohol.
Limpie inmediatamente cualquier mancha debida a una sustancia líquida.
Una vez instalada la alfombra, puede suceder que algunas partes tengan pliegues. Estos
pliegues desaparecerán pasados unos días, una vez que las fibras del pelo hayan recuperado su forma inicial. Para facilitar su instalación y asegurar una mejor base, puede
colocar su alfombra sobre un antideslizante.
Para el mantenimiento habitual, aspire regularmente, sin cepillo y con la potencia mínima. También puede espolvorear ampliamente la alfombra de tierra de Sommières, dejar
que el polvo actúe durante unas horas y luego aspirar.
Al comienzo de su uso, puede suceder que su alfombra «suelte pelusas», es decir, que
salgan fibras sobrantes. Todo esto es normal y desaparecerá en unas pocas semanas.
Nunca lo fuerce frotándolo, solo acentuarás el fenómeno.
También es posible que sobresalgan hilos. En este caso hay que cortarlos con unas tijeras,
y sobre todo no tirar de ellos.
Debe actuar inmediatamente tratando la mancha desde el exterior hacia el interior. Primero quite la mayor parte de la mancha con una cuchara. Empape el resto con un paño blanco seco o una toalla de papel. Finalmente, frote el área de la mancha con agua tibia, posiblemente con un detergente adecuado para alfombras. Repita esto dos veces más si es necesario. Si la mancha persiste, contacte a un profesional rápidamente.
La seda vegetal es una fibra de origen natural elaborada a partir de celulosa (viscosa). Es una cualidad delicada que requiere un mantenimiento especial. Es una fibra muy fina e hidrofílica. Por tanto, el agua tenderá a rizarla y compactarla. En caso de mancha, crear una capa de Tierra de Sommières a su alrededor para cortar la capilaridad, luego proceder como se describe en el párrafo anterior. Es importante secar el exceso de agua rápidamente y secar la fibra con secador, alborotándola con los dedos o con un cepillo de cerdas para devolverle su plenitud desde el exterior hacia el interior; no permita que el líquido se evapore y se seque al aire. En caso de duda, contacte con un profesional que lo limpiará con agua, o mediante inyección-extracción en caso de instalación encolada o estirada.
Nuestras alfombras están fabricadas con métodos tradicionales, puede suceder que su
tamaño sea ligeramente diferente o que los bordes no queden perfectamente rectos. Se
tolera una variación de +/- 3% de la dimensión.
No se recomienda exponer su alfombra a la luz solar directa y a la luz de la luna, que
blanquean inexorablemente las fibras.
Gire su alfombra cada seis meses para distribuir las áreas de tráfico.
No se recomienda colocar la alfombra anudada en un piso de suelo radiante.